Diem era un presidente católico en un país cuya mayoría social procesaba la religión budista, y establecía una política represiva para con los derechos de este colectivo. Entre las muchas manifestaciones y protestas, aquella mañana tendría lugar lo que después se convertiría en práctica "habitual" de protesta, la autocremación de monjes budistas como reflejo de su alto nivel de implicación y veracidad respecto a las injusticias que denunciaban.Thích Quảng Đức, el monje budista objeto de la imagen, aparece en la fotografía sereno, ardiendo de piernas cruzadas en medio de la calle. Y así lo hizo hasta morir, puesto que nadie se interpuso en sus intenciones. La suya era una protesta que además de suponer compromiso con sus derechos y los de sus coetáneos, lograría que este conflicto atravesara barreras y los medios de comunicación de todo el mundo pusieran su punto de mira sobre Saigón.
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